Iranzu deja La buena vida.
Nos hemos quedado huérfanos de esa voz susurrante, a veces al oído, que odiaba las notas altas sabedora de sus limitaciones y que en los tonos graves se encontraba su dulzura, y donde no tenía rival, pues había sabido desarrollar su carrera en ese espacio ligado a la noche y los sentimientos.
La buena vida sigue, pero no es lo mismo. No lo es, y eso les obrigará a cambiar.
Esta es una de esas noticias que no nos encontraremos en un titular de un periódico, pero que para mi ocuparía todas las portadas y todos los telediarios.
Qué nos va a pasar
2 comentarios:
A mí no se me ha pasado el enfado desde que me enteré, ya no es sólo tristeza, es mucho más, es cabreo. Nos ha hecho una faena de las gordas.
Pues sí, yo también lo siento, gracias a tí, este era mi grupo preferido!!!!!!
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